¿Si no consumo lácteos, me faltará calcio?

Esta es una pregunta que muchos se han cuestionado, y es que la sociedad nos ha cultivado ese pensamiento de "si no tomas leche, no tendrás huesos fuertes", pero ¿por qué no indagar más allá en el asunto?, quizás nos encontremos con sustitutos que nos puedan brindar todo lo que los productos lácteos contienen, o quizás no, pero, no nos vamos a quedar con la incógnita, veamos si logramos hallarlos.

Se dice que la leche es un alimento insustituible en todas las etapas de la vida de una persona que se encuentra consumiendo una dieta equilibrada, pero qué me dicen sobre aquellas personas que por motivos éticos no consumen lácteos, y viven su vida plenamente, acaso ellos vivirán menos tiempo que una persona que sí los consume, ciertamente no, a pesar de que numerosas investigaciones demuestran el papel tan esencial que representa la leche y sus derivados como nutriente para el correcto funcionamiento del organismo, no es necesaria para nuestra salud. Desde pequeños nos han inculcado beber leche para tener huesos fuertes, sin embargo, desde que ocurre el destete el consumo de este alimento no es algo que necesitemos. Además, un ejemplo tan claro es cuando el organismo en ciertas personas deja de fabricar lactasa y es allí donde nos damos cuenta de que el cuerpo dice “¡basta! ya no es tiempo para que sigas tomando leche”, pero claramente esto les sucede a pocas personas con intolerancia a la lactosa. [1]

Numerosos estudios han rebelado que si se consume altamente este alimento en la vida adulta, el organismo es obligado a usar el calcio de los huesos para mantener el pH sanguíneo en su punto correcto, llegando así a desmineralizar el sistema óseo, lo cual provoca una mayor probabilidad de sufrir osteoporosis. Por otra parte, la leche es un alimento de difícil digestión debido a que contiene proteínas que pueden generar reacciones inflamatorias en nuestro organismo. [2]

Si bien es cierto, los productos de origen vegetal no logran ser completamente sustitutos de los lácteos ya que estos no pueden satisfacer todos los requerimientos nutricionales de la vitamina D y calcio, sin embargo, la soya es una buena alternativa ya que contiene todos los aminoácidos que se necesitan para una proteína completa, por ello forma parte dentro del grupo de “Alimentos con contenido moderado y alto de calcio” en la Guía de Alimentos para la Población Mexicana.

 

A modo de cierre, sabemos que el 99% de calcio se encuentran en huesos y dientes, además de mantenerlos fuertes, también, permite que funcionen muy bien los nervios, corazón, músculos y coagulación de la sangre. El requerimiento de este varía según la edad y dependiendo la situación, por eso es bueno consultar con un dietista para conocer cuánto calcio deberás consumir, recordar que se lo puede encontrar en los frutos secos, legumbres, sardinas, langostinos, higos, garbanzos, aceitunas, lentejas o espinacas. [3] Entonces, para contestar a nuestra incógnita, se puede decir que, el consumo de los productos lácteos es recomendable pero no indispensable y entre esos dos términos hay una enorme diferencia.

BIBLIOGRAFÍA

[1] Feskanich D et al. (2014) Milk consumption during teenage years and risk of hip fractures in older adults. JAMA Pediatr. Jan;168(1):54-60. doi: 10.1001/jamapediatrics.2013.3821. PMID: 24247817; PMCID: PMC3983667.

[2] Karl Michaëlsson et al. (2014). Milk intake and risk of mortality and fractures in women and men: cohort studies. BMJ, 349. https://doi.org/10.1136/bmj.g6015

[3] Rodríguez Huertas et al. (2019) Leche y productos lácteos como vehículos de calcio y vitamina D: papel de las leches enriquecidas. Nutr. Hosp. [online] vol.36, n.4 pp.962-973. Disponible en: <http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0212-16112019000400030&lng=es&nrm=iso>.  Epub 17-Feb-2020. ISSN 1699-5198.  https://dx.doi.org/10.20960/nh.02570.